Primer control prenatal: ¿De qué se trata y qué puedes consultar?

Sabemos que cada embarazo es único y preciado para las familias, es por eso que, ya sea tu primer embarazo o no, al saber que estás embarazada te llenas de preguntas, dudas y preocupaciones.
A pesar de que el embarazo no es una enfermedad, necesita cuidados especiales, es por eso que, en el primer control prenatal, tu ginecólogo hará una valoración completa de tu estado de salud físico y psicológico, determinando si es un embarazo de alto o bajo riesgo.
Se recomienda que este control se haga entre la semana seis y 12 de embarazo. Si es que tienes algún riesgo de salud o una enfermedad crónica, puede que tu médico recomiende hacerlo antes.
Durante el primer control prenatal, el ginecólogo te realizará una serie de pruebas y exámenes, entre los que se incluyen:

• Una entrevista, en la que se te preguntará sobre tu historia clínica, tus hábitos de salud, y cualquier riesgo que puedas tener para tu salud o la del bebé.
• Un examen físico, que incluirá la medición de la altura, el peso, la presión arterial, el pulso y el ritmo cardíaco.
• Un examen pélvico, que se realiza para evaluar la salud de los órganos reproductivos.
• Análisis de sangre, que se utilizan para evaluar tu salud general y para detectar posibles infecciones o problemas de salud.
• Análisis de orina, que se utilizan para detectar infecciones o problemas de salud.
• Ecografía, que se utiliza para confirmar el embarazo y para evaluar el desarrollo del feto.

En base a los resultados de estas pruebas y exámenes, el médico establecerá un plan de atención prenatal personalizado. Este plan incluirá la frecuencia de las visitas prenatales, los exámenes y pruebas que se realizarán en cada visita, y las recomendaciones de salud para tu embarazo.

Riesgos en el embarazo, preguntas que puedes hacer en tu primer control prenatal

Debes aprovechar al máximo el tiempo en la consulta con tu ginecólogo y hacer todas las preguntas que creas necesarias para estar tranquila y segura durante los primeros meses.
Durante estas primeras semanas sentirás cambios físicos y emocionales, por lo que es importante que los conozcas y que sepas cuando algo no está saliendo como lo esperado.
Estos son algunos puntos en los que debes poner atención y aprovechar de preguntar en tu primer control prenatal:

• Sangrado genital: Un sangrado genital en el embarazo siempre es motivo de consulta a tu médico. En ocasiones, cuando la pérdida de sangre es poca, puede deberse a la implantación del embrión, sin embargo, eso es algo que debe indicar tu médico.
• Fiebre alta: Temperatura superior a los 38°C en el embarazo es siempre motivo de consulta médica, aún más en el primer trimestre del embarazo.
• Dolor tipo menstrual: Durante el embarazo tu útero está en crecimiento y en constante cambio, por lo que podrás sentir dolores muy parecidos a los de tipo menstrual. Cuando este dolor es suave, es normal, sin embargo, cuando el dolor es intenso y aún más si está asociado a sangrado vaginal, debes consultar a tu médico.
• Flujo vaginal: El flujo vaginal se ve aumentado durante el embarazo debido a la irrigación sanguínea e incremento de los niveles de progesterona. Este flujo es más blanco y espeso, sin embargo, si está acompañado de mal olor o picazón, puede sugerir una infección, por lo que te debes consultar con tu médico.
• Congestión mamaria: Durante el embarazo, la glándula mamaria se prepara para la lactancia, es por eso que notarás aumento del volumen de las mamas, pigmentación del pezón y areola, salida de leche (galactorrea), síntomas que son normales durante el embarazo.

Síntomas y molestias del primer trimestre de embarazo

También debes estar atenta si es que tienes algunos de estos síntomas y consultar a tu médico en el primer control prenatal:

Cansancio en el embarazo

Puedes también sentir somnolencia y sufrir de insomnio. Generalmente esto se produce por los cambios hormonales. Es recomendable dormir entre siete u ocho horas diarias, intenta también tomar una siesta después de almuerzo.
Lleva una dieta equilibrada, haz ejercicios, pero no muy cerca de la hora de acostarte, y trata de crear un ambiente tranquilo y oscuro para conciliar el sueño.

Calambres en embarazadas

Suelen producirse en las pantorrillas y muslos, generalmente en la noche o luego de hacer ejercicio.

Pueden generarse por los cambios hormonales, el aumento de peso que ejerce presión sobre los nervios y vasos sanguíneos de las piernas. También por déficit de calcio, magnesio y potasio. Incluye en tu dieta alimentos que contengan estos nutrientes como legumbres, vegetales de hojas verdes, cítricos, plátanos, leche, yogurt y frutas.
Mantén una buena hidratación bebiendo al menos ocho vasos de agua al día, haz ejercicios que sean adecuados para tu embarazo y estira tus piernas. Evita estar sentada o de pie mucho tiempo.

Distensión abdominal, estreñimiento y hemorroides

El crecimiento del útero ejerce presión sobre los intestinos, lo que puede provocar una sensación de distensión abdominal, que puede llevarte a estreñimiento.
Las hemorroides son venas dilatadas en el ano o el recto. Pueden ser internas o externas. Las internas no suelen ser visibles ni causan dolor, pero pueden sangrar. Las externas son visibles y pueden causar dolor, picazón y sangrado. Las causas en el embarazo pueden ser por la presión en el abdomen, el aumento de los niveles de estrógeno o por el estreñimiento.
Para evitar o aliviar estos síntomas, consume una dieta rica en fibra, ya que esta ayuda a que los alimentos se muevan más fácilmente a través del sistema digestivo. Incluye frutas, verduras, cereales integrales y legumbres. Bebe también mucha agua y haz ejercicios.
Recuerda siempre consultar con tu médico sobre cualquier síntoma o molestia que tengas en el primer trimestre de embarazo, y aprovecha de aclarar todas tus dudas en el primer control.