Cirugía previa y embarazo: ¿Cómo influyen estos procedimientos?

Cuando estás embarazada, lo que más te preocupa es el desarrollo y la salud de tu bebé. Sin embargo, en el camino aparecen otras dudas e inquietudes, que en este artículo te ayudaremos a resolver. Por ejemplo, ¿cómo influyen tus cirugías previas en el embarazo?, ¿conllevan algún riesgo para ti o para tu hijo?

En este contexto, nos enfocaremos en tres tipos de cirugías, que generan dudas en la mayoría de las mujeres embarazadas: la bariátrica, la de implantes mamarios y la de reducción mamaria ¿Qué sabes de ellas?

Cirugía bariátrica y embarazo: Entérate de los cuidados que debes tener

Lo recomendable es que tu cirugía bariátrica haya sido, al menos, 18 meses antes de tu embarazo para evitar complicaciones ¿La razón? Se estima que en ese período ya tendrás un peso estable.

De todas maneras, y en el caso de que estés planificando la llegada de tu hijo, debes considerar lo siguiente:

Lo que debes hacer antes y durante el embarazo

Después de la cirugía bariátrica, y con la rápida disminución de peso que ésta conlleva, experimentarás una deficiencia de la vitamina B12, vitamina D, ácido fólico, yodo, calcio, fierro y otras vitaminas liposolubles. Por eso, es importante que tomes algunos cuidados, tales como:

1. Realizarte exámenes de laboratorio: Es fundamental que antes de convertirte en madre visites a tu médico especialista para que te de una orden médica, en la cual te indique qué tipo de muestras se deben analizar. Con los resultados, el profesional podrá determinar si tu organismo ya está preparado para el embarazo.
2. Tener un seguimiento durante el embarazo: Mientras esperas a tu bebé, tu médico tratante podrá monitorear la salud de ambos. Por ejemplo, en el tercer trimestre comenzará a pedirte ecografías mensuales para ir revisando y controlando el crecimiento fetal.
3. Prevenir la diabetes gestacional: Esta enfermedad disminuye su riesgo en mujeres embarazadas, que han tenido recientemente una cirugía bariátrica, pero no lo elimina completamente. Por eso, para evitar su aparición y velar por un embarazo saludable, tu médico te solicitará glicemias en ayunas o monitoreos continuos de éstas durante varios días.

La relación entre cirugías mamarias y la lactancia en el embarazo

Otra preocupación que puedes tener como madre es si la cirugía de implantes mamarios, que te realizaste anteriormente, influye en tu embarazo, y sobre todo en el período de lactancia.

En este caso, te recomendamos que el médico especialista que monitoree tu embarazo sepa de tu operación anterior porque existen otros factores, que debe considerar. Por ejemplo, que hayas recibido una buena técnica quirúrgica o que hayas tenido un adecuado cuidado postoperatorio.

Cabe destacar, que cualquier mujer que tenga implantes mamarios podrá amamantar a su bebé. Esto, porque las prótesis se ubican detrás del músculo del pecho y la cicatriz queda bajo la mama, entonces no se dañan los tejidos glandulares.

La excepción es cuando los implantes son muy grandes porque ejercen presión sobre los senos y esto podría provocar que los tejidos adyacentes se atrofien. Así, los implantes mamarios sí podrían afectar la producción de leche.

Implantes mamarios y lactancia: ¿Es perjudicial para el bebé?

Actualmente, no existe evidencia científica que demuestre que los implantes mamarios tengan un efecto negativo en la salud de los lactantes. Tampoco se puede afirmar que la silicona (silicio y otros componentes) contamine la leche materna.

¿Afecta la reducción mamaria a la lactancia?

Esta cirugía tiene una mayor repercusión sobre los tejidos porque se elimina gran parte de ellos durante la intervención, bloqueando los conductos por los cuales pasa la leche. Además, la areola y el pezón cambian de posición, y los puntos que se realizan sobre la glándula también pueden afectar su sensibilidad.

Por esto, la reducción mamaria se asocia a una menor producción de leche materna y, si éste es tu caso, es recomendable que no amamantes porque tendrás un mayor riesgo de desarrollar mastitis. Esto, por los esfuerzos que supone expulsar la leche sin el óptimo funcionamiento de los conductos galactóforos, que son los que la transportan.

En pocas palabras, si te sometiste a una cirugía previa, como la bariátrica, no tendrás mayores inconvenientes siempre y cuando ésta haya ocurrido 18 meses atrás. Sin embargo, debes consultar a tu médico especialista, quien controlará todas las etapas de tu embarazo para proteger tu salud y la de tu bebé.

Caso similar es de la cirugía de implantes mamarios, que no te traerá complicaciones durante la lactancia, pero sí la reducción mamaria, que no se recomienda antes del embarazo.

Si eres madre, estás embarazada o quieres planificar tu embarazo, recuerda tener en cuenta esta información. Tu salud es Esencial.